Lo primero para cumplir con nuestros objetivos, metas,
propósitos, proyectos es:
Asumir retos, diseñar estrategias, formas de responder ante
los problemas, que nos ayudan a aprender de forma positiva en la vida y a
madurar, es una manera de responder a las dificultades, contratiempos,
adversidades o circunstancias no planeadas.
Lo más importante que debes saber a la hora de fijarte una
meta es que eres capaz de hacerlo, sea lo que sea. Puedes desear comprarte una casa, un cambio
de coche, empezar una dieta, estudiar aquello que tanto deseabas ,casarte,
viajar… pero si no decides nunca, cuándo lo harás, no lo harás nunca...
Es importante marcarse objetivos en la vida. ¿Para qué? Para
darle un sentido a lo que hacemos. Piensa en algo que quieras conseguir, algo
que deseas y quieres que se convierta en realidad. ¿Ya lo tienes? Piensa en
algo que sea significativo. ¿Cómo de importante es eso para ti? ¿Lo
visualizas?...
Muchas personas lo visualizaban, y dejaron de hacerlo porque
al ver que no se cumplían, dejaron de creer en sí mismos y en su potencial. Hay
que superar a los miedos, los límites,
debemos aprender a asimilar fracasos y aprender de forma positiva de ellos, a
superar situaciones adversas, y conseguir más equilibrio emocional. Y así
superarás los miedos, las barreras mentales, afrontaras con positividad las
adversidades, ya que las convertiremos en retos, debemos de transformar nuestras
amenazas en objetivos y nuestras debilidades convertirlas en fortalezas
personales.
Y comenzarás a desarrollar o diseñar solo o con ayuda un
plan de acción, para convertir tus sueños, objetivos y metas en realidades,
como la vida misma.
Pero no solo con trazar un plan de acción hemos cumplido,
tenemos que ser inteligentes emocionalmente y barajar múltiples opciones, por
si nos falla el plan A, tener, el plan B,C, D,E….Z.
¿Cuántas cosas puedes llegar a desear a lo largo de tu vida?
¿Cuántas de ellas conseguirás? Todas las que pasen a ser objetivos. ¿Y cuál es
la diferencia? Convertir un deseo en un
objetivo, bastaba con ponerle una fecha, un plazo.
Convierte los deseos en objetivos. El objetivo tiene que
estar expresado en positivo. Algunas personas identifican rápidamente lo que no
quieren, por ejemplo: “no quiero sentirme inferior”. Vale; y si no quieres
sentirte así, ¿cómo quieres sentirte? “Quiero tener más confianza en mí mismo”:
ése es el objetivo.
Que dependa exclusivamente de ti. Muchas veces nos
frustramos porque estamos intentando una y otra vez conseguir algo que no
depende solo de nosotros. Basta de ponerte obstáculos! Nadie ha ganado una
carrera pensando “No voy a llegar, me voy a cansar a la mitad”. Es muy
importante que realices afirmaciones positivas y optimistas sobre ti misma.
Visualízate consiguiendo eso que tanto deseas, y piensa en todos los beneficios
que te va a traer en otras facetas de tu vida.
Especifícalo al máximo. Si ya lo tienes definido y ya sabes
que es algo que depende de ti, ahora piensa: ¿dónde quieres conseguirlo?
¿Cuándo lo vas a hacer?¿Con quién?¿Con quién no lo vas a hacer? También es
importante: recuerda que, quien no suma, resta.
Después pasar a la puesta en marcha, esto nos obliga a salir
de la zona de confort, pero así comienzan los cambios reales en las personas,
pasando a la acción, los rodajes de las películas, el desarrollo del guión, lo
elabora uno mismo, eres el protagonista y guionista de tu vida, no dejes que
los demás escriban por ti o lo dejes en un libro en blanco, sin rellenar,
tenemos, muchos tomos que escribir, muchos capítulos que rellenar y muchas
aventuras a descubrir.
Comienza gestionando el tiempo, organizando tu vida y
desarrollando los propósitos para este nuevo año. Aprende a reconocer,
identificar y separar lo importante de lo urgente y que cumplas con todo
aquello que te llena de verdad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario