jueves, 3 de abril de 2014

¿Eres un procrastinador?

Si  te sientes como una   persona que siempre encuentra una excusa para dejar todo para más tarde, para postergar sus tareas del día a día, tanto las importantes como las más insignificantes, eres procastinador.



Si te sientes así, o crees que lo eres, no te asustes, simplemente has desarrollado  el hábito de aplazar las cosas que deberíamos hacer, enredándote en tareas menos importantes o incluso desperdiciando y malgastando  tu tiempo de forma  deliberada en cosas que te obligas a creer que son más urgentes.

Todo ello focalizado y centrado desde el miedo, el desasosiego , por pereza, la comodidad y porque analizar demasiado algo ,nos lleva , “a la parálisis del análisis…”


Uno de los culpables de que la procastinación este proliferando, está en el desarrollo de nuestra cultura con las nuevas tecnologías, internet, se ha convertido en un germen infinito de procastinación. Hemos desarrollado una herramienta llena de estímulos para procastinar, aunque he de decir que internet es muy práctico y funcional siempre llevado desde un buen uso.


Una persona con potencial para procastinar y no realizar la tarea principal , busca de forma involuntaria las distracciones , no se da cuenta de que esa situación es muy poderosa , que le provoca de manera indirecta evadirse de la tarea o actividad principal, ya que  no tiene las ganas  al 100% de acometerla. Aunque nuestros objetivos mentales sean razonables o incluso necesarios para alcanzar algún fin importante, la mayoría de nosotros, en un momento u otro, “nos despistamos”.


Retira las famosas frases de:

“Yo soy así. Soy vago de nacimiento. No puedo cambiar…”
“Lo haré mañana…”
“Seguro que mañana con más tiempo…, se me da mejor…”
“No, todavía no me he puesto con …, porque últimamente tengo mucho trabajo”
“No tengo tiempo para …”
“Me queda por resolver cuatro cosas antes de acudir a esa actividad que es tan importante…”

Luego ,nos cuesta comprender,  como algunas personas llegan a todo, y otros ni siquiera consiguen su objetivo diario…

¿A estas alturas no te has dado cuenta de que “las ganas no vienen solas”?, ¿te faltan horas en el día?, ¿necesitas más horas?, o …¿tienes que organizarte mejor?...

El problema, es que de forma imperceptible aplazamos lo que es significativo, transcendental substancial e importante hacer, pero decidimos  sumergirnos y recrearnos en actividades que no nos hagan pensar : ver la televisión, por ejemplo.

No digo que ver el último capítulo de “La que se avecina” no sea importante, o mirar el estado de tus amigos en Facebook, twitter, o las maravillosas fotos del instagram…, pero seguramente es un objetivo con menos prioridad que muchos otros.
Si tú no te pones en marcha nunca sentirás que es el momento de hacerlo. Empieza a hacer las cosas pendientes, el hecho de hacerlo te reforzará a seguir haciéndolo. De lo contrario, tus problemas no serán los problemas en sí, sino el hecho de no haberte puesto con ellos...
Recuerda que si tú no tomas cartas en el asunto, las cosas que dependan de ti no se van a resolver solas. Sin caer en la angustia, intenta organizarte no dejando pasar demasiado tiempo en resolverlos. Ponerte unos días límite te ayudará a conseguirlo.
Una buena opción es que un coach pueda orientarte en todo aquello para afrontar los problemas , ya que  hay que tomar cartas en el asunto cuánto antes.
Este hecho puede ahorrarte muchas molestias. Sin embargo, ten cuidado; no conviertas esta actitud positiva en un error haciéndolos demasiado rápido o angustiándote por ser muy perfeccionista.



RECUERDA : “si quieres triunfar, no te quedes mirando la escalera. Empieza a subir, escalón por escalón, hasta que llegues arriba.”

Antonio Muñoz Boluda


No hay comentarios:

Publicar un comentario